El conocimiento como camino hacia Dios

dprietoc · **Publicado:** Dom Mar 17, 2013 10:01 pm

Hola a Tod@s.
de esta gran intervención por parte del Buen Maestro Corbio viene a mi mente una vieja lección filosófica:
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Leyendo los 3 capiteles en secuencia me recuerda:
1. Capitel:
Mundo inteligible.
2. Capitel:
El alma encarna en este plano terrenal para aprender y encontrar en el conocimiento el regreso a Dios.
3. Capitel:
La reunión con el mundo inteligible y el re aprovecho del conocimiento.

Un abrazo.

Corbio · **Publicado:** Mar Mar 19, 2013 7:51 am

Hola a todos

Amigo dprietoc, muy buena intuición. Como todo el mundo conoce, la filosofía teológica neoplatónica es fundamental para entender el románico; pero también los símbolos.
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Citar:

“Esta es la razón por la cual al Hombre primordial se le asigna simbólicamente el Quinario, porque representa la presencia del Principio (Unidad -1-) en el seno del Mundo (Cuaternario -4-): 1+4=5. De hecho, el Quinario es un símbolo de la presencia de la Vida en el seno del Mundo.”
Josep. M. Gràcia, Simbólica arquitectónica,p.157

En el monasterio de Santo Domingo de Silos, alguien colocó la estrella de cinco puntas sobre una cruz; algo así como el cielo sobre la tierra o una manera muy sencilla de hablar de la doble naturaleza de Cristo. Nada, el conocimiento como camino hacia Dios, en Cristo Jesús, pasó por la aceptación de una muerte en cruz, una experiencia desgraciadamente muy humana. Seguimos.
Un abrazo a tod@s

Corbio · **Publicado:** Jue Mar 21, 2013 7:55 am

Hola a todos

¿Existen diferentes conocimientos en la fe como camino hacia Dios? Parece ser que sí y que así lo interpretaban los teólogos redactores de algunos conjuntos iconográficos románicos.

En el museo de Navarra, se conserva este capitel del antiguo claustro románico de la catedral:
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Reproduce un pasaje del capítulo XX del Evangelio según San Juan:

Citar:

“1 El primer día de la semana va María Magdalena de madrugada al sepulcro cuando todavía estaba oscuro, y ve la piedra quitada del sepulcro. 2 Echa a correr y llega donde Simón Pedro y donde el otro discípulo a quien Jesús quería y les dice: "Se han llevado del sepulcro al Señor, y no sabemos dónde le han puesto." 3 Salieron Pedro y el otro discípulo, y se encaminaron al sepulcro. 4 Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió por delante más rápido que Pedro, y llegó primero al sepulcro. 5 Se inclinó y vio las vendas en el suelo; pero no entró. 6 Llega también Simón Pedro siguiéndole, entra en el sepulcro y ve las vendas en el suelo, 7 y el sudario que cubrió su cabeza, no junto a las vendas, sino plegado en un lugar aparte. 8 Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado el primero al sepulcro; vio y creyó, 9 pues hasta entonces no habían comprendido que según la Escritura Jesús debía resucitar de entre los muertos. 10 Los discípulos, entonces, volvieron a casa.”

La Magdalena anuncia la resurrección a los discípulos y San Pedro y San Juan corren hacia el sepulcro. En la imagen del capitel, San Pedro se reconoce por venir connotado con la llave y estar ya dentro del sepulcro:
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Sin embargo, en la iconografía, María Magdalena no señala a San Pedro con el dedo en señal de ser el primero, sino que apunta hacia otro discípulo. Es aquí donde entran los caminos del conocimiento que llevan hacia Dios según las interpretaciones teológicas:

Citar:

“Entra primero Pedro en el sepulcro, después Juan; pero como ambos corren, ambos entran. Y, por esto, porque se ha escrito “A no ser que no hayáis creído, no entendéis”, necesariamente la fe precede al testimonio de la Sagrada Escritura; después, a continuación, viene el entendimiento, al cual se le prepara la entrada por medio de la fe. Así pues, Pedro conoció a Cristo Dios y hecho ya hombre en el tiempo, y dijo: “Tú eres Cristo, el Hijo de dios vivo.” Voló muy alto. Pero más alto voló aquel que comprendió que el mismo Cristo Dios había sido engendrado de Dios antes de todos los tiempos, diciendo: “en el principio era el Verbo”
Juan Escoto Eriúgena, Vox sipiritualis Aquilae, Homilía al Prólogo del Evangelio de San Juan.

Una homilía de la que todavía existe copia en Pamplona (Diputación, homiliario, fol. 1-3v (s. XIII/XIV)), pues se seguía utilizando más tarde de la fecha de ejecución propuesta para estos capiteles.

En pocas palabras, los capiteles románicos de la catedral de Pamplona pueden estar remitiendo a lecciones teológicas concretas (de uso, entre los canónigos de la catedral, pues se siguen copiando con posterioridad) a través de sus detalles plásticos. Nada, el conocimiento visto en imágenes a través de una lección de teología.
Un abrazo a tod@s

PIRATESA · **Registrado:** Vie Oct 08, 2010 8:45 am **Mensajes:** 1866

El capitel es maravilloso, tenemos unas joyas en nuestros museos que no tienen nada que envidiar a otros más renombrados.

Corbio, no sé si llego a entender bien porqué señala María Magdalena a los otros discípulos ¿Porque no tenían el conocimiento previo de la fé como San Pedro??? Saludos.

Corbio · **Publicado:** Jue Mar 21, 2013 8:46 pm

Hola a todos
Amiga Piratesa, intentaré explicarme mejor. Pero, saldrá una entrada un poco larga. En el capitel del antiguo claustro románico de la catedral de Pamplona, se esculpieron dos imágenes de manera sucesiva como si se tratase de una película:

En la primera: María Magdalena acompaña a San Pedro (connotado con barba y señalando el uno con un dedo) y a San Juan (el discípulo joven sin barba colocado detrás). María Magdalena señala precisamente con el dedo no a San Pedro, sino a la figura que sería San Juan, siguiendo estos versículos del evangelio de San Juan:

Citar:

“1 El primer día de la semana va María Magdalena de madrugada al sepulcro cuando todavía estaba oscuro, y ve la piedra quitada del sepulcro. 2 Echa a correr y llega donde Simón Pedro y donde el otro discípulo a quien Jesús quería y les dice: "Se han llevado del sepulcro al Señor, y no sabemos dónde le han puesto." 3 Salieron Pedro y el otro discípulo, y se encaminaron al sepulcro. 4 Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió por delante más rápido que Pedro, y llegó primero al sepulcro. 5 Se inclinó y vio las vendas en el suelo; pero no entró.”

En la segunda imagen, se relata el hecho de que San Pedro entra el primero en el sepulcro, es el primer discípulo en hacerlo. El hecho de la primacía de Pedro sobre los demás discípulos. Iconográficamente, se acompaña con el detalle de las llaves, que pertenece al evangelio de San Mateo. Vendría a corresponder con estos versículos del evangelio de San Juan:

Citar:

“6 Llega también Simón Pedro siguiéndole, entra en el sepulcro y ve las vendas en el suelo, 7 y el sudario que cubrió su cabeza, no junto a las vendas, sino plegado en un lugar aparte.”

Pero, el detalle plástico del dedo de María Magdalena apuntando a San Juan lleva hacia estos últimos versículos del evangelio de San Juan:

Citar:

“8 Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado el primero al sepulcro; vio y creyó, 9 pues hasta entonces no habían comprendido que según la Escritura Jesús debía resucitar de entre los muertos. 10 Los discípulos, entonces, volvieron a casa.”

Pero, sobre todo, a interpretaciones teológicas como esta:

Citar:

“Pedro conoció a Cristo Dios y hecho ya hombre en el tiempo, y dijo: “Tú eres Cristo, el Hijo de dios vivo.” Voló muy alto. Pero más alto voló aquel que comprendió que el mismo Cristo Dios había sido engendrado de Dios antes de todos los tiempos, diciendo: “en el principio era el Verbo”

Texto que todavía hoy es interpretado en esta misma línea de pensamiento por otros autores:

Citar:

“En definitiva, pues, el hombre debe progresar con su inteligencia hasta la comprensión del todo> que estará de acuerdo con lo revelado. No se trata de detenernos en la Fe, es preciso profundizar en ella y eso por una sencilla razón, como nos dice en el De Divisione Naturae; «Es necesario seguir siempre la autoridad de las Sagradas Escrituras porque en ellas, como en arcas secretas, está contenida la verdad»

De otro lado, se hace alusión a que la más alta categoría humana es el ascenso intelectual para la comprensión de lo verdadero. Un bello pasaje de la Homilia itt Prologum Sancti Evangelii secundun Joan nem, en el que se nos narra la entrada de Pedro y Juan en el sepulcro de Cristo, que simboliza a las Escrituras, es enormemente elocuente para esta cuestión y es necesario que lo reproduzcamos:

«Entra primero Pedro en el sepulcro, después Juan; pero como ambos corren, ambos entran. Y, por esto, porque se ha escrito «A no ser que no hayáis creído, no entenderéis», necesariamente la fe precede al testimonio de la Sagrada Escritura; después, a continuación, viene el entendimiento, al cual se le prepara la entrada por medio de la fe. Así pues, Pedro conoció a Cristo Dios y hecho ya hombre en el tiempo, y dijo: «Tú eres Cristo> el Hijo de Dios vivo.» Voló muy alto. Pero más alto voló aquél que comprendió que el mismo Cristo Dios había sido engendrado de Dios antes de todos los tiempos> diciendo: «en el principio era el Verbo» (P. L. Migne, vol. c., 284, C-285 B).

El reconocimiento de la necesidad de la Ratio y su valor pone en primer plano el tema de la relación Ratio-Auctoritas.”
Adolfo Arias Muñoz, El sentido metafísico del De Divisione Narurae de J. Escoto Erígena.

Una interpretación teológica, esta de Eriúgena, que era lectura obligatoria el día de Navidad. Y, además, todavía hoy, se conserva una copia de los siglos XIII-XIV en la Diputación Foral de Navarra.
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Amiga Piratesa, espero que te haya quedado algo más clara esta propuesta de lectura de este hermoso capitel románico. Hay más detalles plásticos, pero mejor no me enrollo más.
Un abrazo a tod@s

Eadan · **Publicado:** Vie Mar 22, 2013 2:45 am

Mis disculpas por la intromisión, pero hay dos asuntos que me inquietan de la explicación anterior.

El primero de ellos, es la cita de esa materialización posterior de un homiliario, fol. 1-3v (s. XIII/XIV)), que se seguía utilizando más tarde de la fecha de ejecución propuesta para estos capiteles; es decir, una homilía posterior al IV Concilio de Letrán, donde precísamente se anatemizan las ideas del Eriúgena... ¿sobrevivieron acaso en Pamplona sus enunciados?

El segundo asunto, sin embargo, viene en relación con la creencia de que no hay nada gratuito en el románico y en el pasaje que se cita del evangelio de San Juan, haría necesario una doble intervención de San Pedro para que coincidiese con lo que vemos en el capitel, cosa que no sucede desde mi particular punto de vista. Los discípulos Juan y Pedro son los dos que efectivamente se encuentran tras la Magdalena, que ha llegado la primera al sepulcro y después ha corrido a avisarles. Por eso vemos a Pedro tomando con su mano derecha un trozo de tela, el sudario. Después María, se queda a solas ante el sepulcro portando el frasco de los ungüentos y ve a Cristo vencedor del Hades -sólamente porta una llave que cuelga de su muñeca, connotado todo Él renaciendo de la floresta-, pero no le reconoce en un primer momento y le confunde con el jardinero:
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El relato del capitel así -insisto que desde mi particular punto de vista- coincidiría de manera plena con lo narrado en el capítulo correspondiente del Evangelio de Juan:

Citar:

1El domingo muy temprano, cuando todavía estaba oscuro, María Magdalena fue a la tumba donde habían puesto a Jesús. Al acercarse, se dio cuenta de que habían movido la piedra que tapaba la entrada de la tumba. 2 Entonces fue corriendo a donde estaban Simón Pedro y el discípulo favorito de Jesús, y les dijo: «¡Se han llevado de la tumba al Señor, y no sabemos dónde lo habrán puesto!»

3-4 Pedro y el otro discípulo salieron corriendo hacia la tumba. El otro discípulo corrió más rápido que Pedro, y llegó primero. 5 Se inclinó para ver dentro de la tumba, y vio las vendas, pero no entró. 6 Poco después llegó Simón Pedro, y entró en la tumba. También él vio las vendas, 7 y vio además que la tela que había servido para envolver la cabeza de Jesús ya no estaba con las vendas, sino que la habían enrollado y puesto aparte. 8 Luego el otro discípulo entró en la tumba. Cuando vio lo que había pasado, creyó. 9 Antes de eso, los discípulos no habían entendido lo que dice la Biblia acerca de que Jesús tenía que resucitar. 10 Entonces Pedro y el otro discípulo regresaron a sus casas.

Jesús se aparece a María Magdalena
11 María se quedó afuera de la tumba, llorando. Mientras lloraba, se inclinó para ver dentro de la tumba, 12 y vio a dos ángeles vestidos de blanco. Estaban sentados, uno donde había estado la cabeza de Jesús y el otro donde habían estado sus pies. 13 Los ángeles le preguntaron:
—Mujer, ¿por qué estás llorando
Ella les respondió:
—Porque alguien se ha llevado el cuerpo de mi Señor, y no sé dónde lo habrá puesto.
14 Apenas dijo esto, volvió la cara y vio a Jesús allí, pero no sabía que era él. 15 Jesús le dijo:
—Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas?
María pensó que estaba hablando con el que cuidaba el jardín donde estaba la tumba. Por eso le dijo:
—Señor, si usted se ha llevado el cuerpo que estaba en esta tumba, dígame dónde lo puso y yo iré a buscarlo.
16 Jesús le dijo:
—María.
Ella se volvió y le dijo:
—¡Maestro!
17 Jesús le dijo:
—No me detengas, pues todavía no he ido a reunirme con mi Padre. Pero ve y dile a mis discípulos que voy a reunirme con él, pues también es Padre de ustedes. Él es mi Dios, y también es Dios de ustedes.
18 María Magdalena fue y les dijo a los discípulos que había visto al Señor, y les contó todo lo que él había dicho. [Juan 20:1-18]

Corbio · **Publicado:** Vie Mar 22, 2013 8:02 am

Hola a todos

Amigo Eadan, magnífica propuesta de lectura la que nos acabas de orfrecer. Allí están las dos.

Personalmente, me decanto más por la primera por un detalle plástico: la no presencia de nimbo crucífero, la aureola con la cruz, en el Cristo resucitado, por mucho que parece que no hay espacio escultórico.
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Si bien es cierto que, el tema de la llave abre ese capítulo a una interpretación apocalíptica teniendo en cuenta este detalle. La iglesia de Roma, El sínodo de Whitby, 664, se impuso a la iglesia cristiano celta irlandesa utilizando este argumento:

Citar:

“18 Y yo te digo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder de la Muerte no prevalecerá contra ella. 19 Yo te daré las llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo".” (Mt. XVI)

Es una evidencia que, en el Románico, se representa a San Pedro iconográficamente con las llaves o llave como en uno de los Discipularios de Santa María la Real de Sangüesa, Navarra:
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La Iglesia de Roma también acabó utilizando este argumento para hablar de la primacía de su cátedra respecto a la de Constantinopla en el Gran Cisma (1054), por ejemplo.

Sin embargo, mientras San Pedro tendría las llaves del Reino de los Cielos, según San Juan, en el Apocalipsis, Cristo se reservó el derecho de las llaves de la muerte y del Infierno (Hades):

Citar:

“12 Me volví a ver qué voz era la que me hablaba y al volverme, vi siete candeleros de oro, 13 y en medio de los candeleros como a un Hijo de hombre, vestido de una túnica talar, ceñido al talle con un ceñidor de oro.14 Su cabeza y sus cabellos eran blancos, como la lana blanca, como la nieve; sus ojos como llama de fuego; 15 sus pies parecían de metal precioso acrisolado en el horno; su voz como voz de grandes aguas. 16 Tenía en su mano derecha siete estrellas, y de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro, como el sol cuando brilla con toda su fuerza. 17 Cuando lo vi, caí a sus pies como muerto. El puso su mano derecha sobre mí diciendo: "No temas, soy yo, el Primero y el Ultimo, 18 el que vive; estuve muerto, pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la Muerte y del Hades.(Ap. I)

Así lo interpretaron también en el románico, como en el Beato de Lorvao:
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¿Por qué explico todo esto? Porque he estado analizando esta doble iconografía sobre la llave: Cristo VS Pedro y, mientras encuentro referencias plásticas de Cristo con las llaves del infierno en los Beatos, es evidente, que no ocurre lo mismo en la iconografía pétrea. De hecho, si fuese así, este capitel de Pamplona sería el primero en ser representado el jardinero-Cristo con las llaves del infierno. Claro está que no he visto todo el románico, pero un poco sí.

Lo dicho, amigo Eadan, magnifica propuesta de lecutra. Seguimos dialogando.
Un abrazo a tod@s

Eadan · **Publicado:** Vie Mar 22, 2013 8:27 am

Corbio escribió:

Sin embargo, mientras San Pedro tendría las llaves del Reino de los Cielos, según San Juan, en el Apocalipsis, Cristo se reservó el derecho de las llaves de la muerte y del Infierno (Hades):

Citar:

“12 Me volví a ver qué voz era la que me hablaba y al volverme, vi siete candeleros de oro, 13 y en medio de los candeleros como a un Hijo de hombre, vestido de una túnica talar, ceñido al talle con un ceñidor de oro.14 Su cabeza y sus cabellos eran blancos, como la lana blanca, como la nieve; sus ojos como llama de fuego; 15 sus pies parecían de metal precioso acrisolado en el horno; su voz como voz de grandes aguas. 16 Tenía en su mano derecha siete estrellas, y de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro, como el sol cuando brilla con toda su fuerza. 17 Cuando lo vi, caí a sus pies como muerto. El puso su mano derecha sobre mí diciendo: "No temas, soy yo, el Primero y el Ultimo, 18 el que vive; estuve muerto, pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la Muerte y del Hades.(Ap. I)

Así lo interpretaron también en el románico, como en el Beato de Lorvao
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¿Por qué explico todo esto? Porque he estado analizando esta doble iconografía sobre la llave: Cristo VS Pedro y, mientras encuentro referencias plásticas de Cristo con las llaves del infierno en los Beatos, es evidente, que no ocurre lo mismo en la iconografía pétrea. De hecho, si fuese así, este capitel de Pamplona sería el primero en ser representado el jardinero-Cristo con las llaves del infierno. Claro está que no he visto todo el románico, pero un poco sí.

Absolutamente de acuerdo con esta última propuesta, Fer, lo que demuestra a la vez, que sí, que estimo que tu auctoritas puede decretar perfectamente que ya has visto románico suficiente.

Más temas coincidentes en relación con los textos del Eurigena y del Hades, podemos encontrar una colección bastante estimable en la red en relación con los estudios realizados sobre el Credo de los Apóstoles, una de las oraciones más antiguas de todos los cristianos.

En la mitología griega, además, cuando cíclicamente Perséfone vuelve cada año con su madre, procedente del reino de su esposo, Hades, la tierra reverdece....

Gracias, amigo.
;-)

PIRATESA · **Registrado:** Vie Oct 08, 2010 8:45 am **Mensajes:** 1866

muchas gracias Corbio por la explicación, me alegro que haya causado un debate enriquecedor, hoy ya sé más que ayer. También gracias a ti, Eadán.

Corbio · **Publicado:** Dom Mar 24, 2013 11:23 am

Hola a todos

Amiga Piratesa, gracias por tus palabras. Lo que está claro es que, como tantas veces he escrito, en este foro, tod@s aprendemos con y de tod@s. Es un placer dialogar con vosotr@s.

Para un cristiano medieval, el problema del conocimiento humano no se puede separar del famoso episodio de la prohibición de Dios sobre el árbol del conocimiento, el del bien y el del mal. el famoso episodio del capítulo III del Libro del Génesis.

Citar:

1 La serpiente era el más astuto de todos los animales del campo que el Señor Dios había hecho, y dijo a la mujer: "¿Así que Dios les ordenó que no comieran de ningún árbol del jardín?".2 La mujer le respondió: "Podemos comer los frutos de todos los árboles del jardín. 3 Pero respecto del árbol que está en medio del jardín, Dios nos ha dicho: ‘No coman de él ni lo toquen, porque de lo contrario quedarán sujetos a la muerte’". 4 La serpiente dijo a la mujer: "No, no morirán. 5 Dios sabe muy bien que cuando ustedes coman de ese árbol, se les abrirán los ojos y serán como dioses, conocedores del bien y del mal". 6 Cuando la mujer vio que el árbol era apetitoso para comer, agradable a la vista y deseable para adquirir discernimiento, tomó de su fruto y comió; luego se lo dio a su marido, que estaba con ella, y él también comió. 7 Entonces se abrieron los ojos de los dos y descubrieron que estaban desnudos. Por eso se hicieron unos taparrabos, entretejiendo hojas de higuera.8 Al oír la voz del Señor Dios que se paseaba por el jardín, a la hora en que sopla la brisa, se ocultaron de él, entre los árboles del jardín. 9 Pero el Señor Dios llamó al hombre y le dijo: "¿Dónde estás?".10 "Oí tus pasos por el jardín, respondió él, y tuve miedo porque estaba desnudo. Por eso me escondí". 11 Él replicó: "¿Y quién te dijo que estabas desnudo? ¿Acaso has comido del árbol que yo te prohibí?".12 El hombre respondió: "La mujer que pusiste a mi lado me dio el fruto y yo comí de él". 13 El Señor Dios dijo a la mujer: "¿Cómo hiciste semejante cosa?". La mujer respondió: "La serpiente me sedujo y comí".

Un texto que fue interpretado de la siguiente manera teológica:

Citar:

1. “Pero quizá tú quieras saber si Dios plantó en el Paraíso… dicho árbol, cuyo fruto mezclado y confuso es el deseo del bien y del mal.”

2. “Se puede interpretar, sin inconveniente, que la higuera en el mandamiento divino de la ley entregado a los primeros hombres en el Paraíso. El mandamiento era el siguiente: “Comed de todo árbol del Edén, pero no comáis del árbol del conocimiento del bien y del mal.””

3. “Y los primeros hombres al no querer comer de este alimento y al creer más en la interpretación engañosa de la serpiente, eligieron no el fruto de la higuera legal para provecho de su espíritu, sino las hojas vanas y llenas de engaño.”

4. “Por el contrario a este árbol se opone otro cuyo fruto es la ciencia del bien y del mal, lo que no significa, sin embargo, que este árbol produzca absolutamente cada uno de estos frutos contrarios, sino que propaga el fruto híbrido y mezclado, compuesto de cualidades contrarias, cuyo alimento prohíbe el dueño de la vida y en cambio la serpiente lo aconseja comer de él, para preparar la entrada de la muerte.”

5. “El alimento de este árbol se constituyó en causa de la muerte para los hombres. Así pues, se ve en qué consiste el alimento de la mezcla de estos frutos que tiene el árbol.”

6. “El árbol del conocimiento del bien y del mal… su fruto es el conocimiento mezclado.”

7. “Y el fruto de este árbol es el conocimiento mezclado del bien y del mal.”

8. "Pues es absolutamente claro para los perspicaces saber cuál es aquel todo árbol, cuyo fruto es la vida, y cuál es el árbol de la fruta mezclada.”
(Juan Escoto Eriúgena)

Nada, el problema del conocimiento humano. Feliz domingo para tod@s, con el recuerdo de las viejas amistades después del segundo café de la mañana.
Un abrazo a tod@s

El conocimiento como camino hacia Dios

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