Queridos amigos:
Durante mi reciente estancia en la serranía de Guadalajara, donde disfruté del otoño más silencioso y hermoso de los que tengo en memoria, tuve la fortuna de que el destino me llevara a internarme en la provincia de Soria. Y digo fortuna porque en cuestión de pocos kilómetros cuadrados encontré tres joyas del románico que vengo a compartir con vosotros porque estoy seguro que nos depararán muy agradables sorpresas. Estoy en proceso de subir todas las fotos al Banco de Círculo, pero de momento voy a iniciar este recorrido con el primero de los templos que constituiría el vértice inferior de un triángulo de localidades situadas en estas tierras de Medinaceli, o Comarca de Arcos de Jalón, y que en la Edad Media fue zona fronteriza entre el reino de Castilla y el reino de Aragón (el Cid siguió el curso del Jalón en su destierro y encontró refugio en los pueblos de esta comarca), dato a tener en cuenta en algunos aspectos de los que vamos a contemplar.
Hablamos de la pequeña localidad de Alpanseque, la cual históricamente ha pertenecido al obispado de Sigüenza en el arciprestazgo de Barahona. La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, conserva modillones de raigambre califal-cordobesa en el muro sur, pero lo más impresionante es su portada románica, a pesar de sus reducidas dimensiones y de su aparente estado de semiabandono; hay que tener en cuenta que estaba tapiada y que hasta 1985 no fue recuperada. Al encontrarse a los pies de un cementerio, el acceso se prometía un tanto complicado, ya que éste último se encuentra también en estado de remodelación, como podéis comprobar en los restos óseos que se encuentran bajo las columnas de la derecha...
Esta es la portada al completo, que data de finales del s. XII o comienzos del s. XIII:
En ella se destaca el singular crismón trinitarioque portan dos personajes, ataviados con vestidura de sacerdote y acólito; la "P" y la "S" llevan una tilde horizontal. Encontraréis muchos parecidos con otros crismones aragoneses, y esto suele achacarse a que por entonces el obispo de Sigüenza, don Rodrigo (1192-1221), a cuya diócesis pertenecía esta localidad, era de origen aragonés.
Hay muchos detalles interesantes en la decoración, que podréis apreciar en otras fotografías, pero voy a finalizar esta entrada con dos capiteles, que también llevan motivos iconográficos apreciados por los alarifes musulmanes, como una sirena de doble cola y la escena de lucha oriental que hemos visto en otras ocasiones:
Veamos lo que dice nuestra apreciada Inés Monteira al respecto:
Pensemos en un ámbito rural poco cultivado donde la repoblación se lleva a cabo con cierta urgencia y las exigencias, en lo que a la naturaleza de la población se refiere, no podían ser muchas. El resultado fue una gran parte de los colonos de origen musulmán. Debió ser difícil de conseguir el afincamiento humano, a juzgar por las medidas de atracción y las tierras que se regalaban'. La construcción de iglesias urgía en estos lugares reconquistados cuya condición religiosa era apremiante cambiar. Puede que esta urgencia determinara, en ocasiones, la utilización de construcciones islámicas por cristianos, la conversión de alminares en campanarios o la erección de la iglesia a partir de los muros de la antigua mezquita. Probablemente, en un primer momento, sobre todo en la zona de San Esteban de Gormaz, los alarifes mudéjares eran los únicos con alguna experiencia en construcción y artes figurativas-, pues hablamos de ámbitos rurales dispersos donde no se podían permitir la importación de artistas foráneos ni de calidad. Así se deduce del carácter del románico de esta región, rural y primitivo en su estilo y alejado de los medios cultivados del Camino de Santiago en su temática. La influencia islámica en la escultura románica de Soria. Una nueva vía para el estudio de la iconografía del románico. Cuadernos de Arte e iconografía.
Espero que os haya gustado esta introducción, y que en las fotos no se aprecien los temblores que ocasionaba el frío gélido que soplaba por aquellas latitudes...
Abrazos.
