Deliciosa, amiga, ... la Ribera Sacra está literalmente suspendida sobre el inquebrantable paisaje de nuestra amada Galiza o cuando no, embravecida sobre la vertical de un meandro de sus ríos, como éste del Miño esculpido al vértigo, que sobrecoge al viajero ante la espectacularidad arrebatadora, envuelto en la gélida tormenta que al día siguiente a la llegada, estallaba en fértil lluvia, obstinada en verterse a cada segundo, según se aproximaba hacia Diomondi por los pasos y rutas que atraviesan el umbrío corazón del bosque sagrado ...
Es entonces, cuando emergiendo de las ingrávidas nieblas -convertidas en deshilachadas y frías fumarolas suspendidas sobre las laderas de los montes-, los marcescentes robles -
carballos en galego- exhiben tenaces los irisados ocres de sus hojas caducas, derramándose suavemente cálidos, como impensable magma arbóreo empecinado en besar la cristalina orilla de los ríos, o tal vez desafiantes huestes, que con su mágico colorido de otoño permanente y vivificante, se sitúan, incólumes, frente a la fantasmagórica y persistente cortina de mortecina lluvia plomiza que todo lo anega... pero no había tiempo ya para más, pues la ruta se estrechaba entre las angostas carreteras locales por las que se ha de transitar hasta Diomondi, cuyo derrumbe en la fachada del palacio anexo al templo, atemoriza a visitantes y locales, dejando al descubierto los precarios arreglos de años pasados, o más bien las carencias, puesto que la retirada de tejas en el alar, junto a la pérdida de canalones y el abandono, no evitaron la filtración de pluviales por el muro justificando su desplome prácticamente total y que afortunadamente no produjo otros males, pese a ser un lugar -según palabras del párroco- frecuentado por los lugareños:
Los caballeros de la Xunta, presentes, apuntaban su atención hacia la extraña construcción suspendida ahora en la pared, una antigua ventana de apariencia románica, reaparecida emparedada en el muro tras el monumental derrumbe , algo curioso que provocará sin duda un cuidado especial en la restauración a efectuar, que se espera más acorde con el palacio y que a la vez sirva de protección y enalltecimiento al conjunto monumental de esta población.
Tras escuchar el análisis de los hechos a los presentes, de los que dimos parte en las noticas de la web el pasado día 30/12/2010, solicitamos permiso para visitar el interior del templo, aconsejándonos no introducirnos en el edificio perjudicado, lo que hicimos con cumplida obediencia a fin de testimoniar la preservación del estado actual de la iglesia románica.
Prosigamos, pues para esto es necesario refugiarnos en el interior, tratando de recuperar la templanza y la desazón, momentos que aprovechamos para contemplar absortos la simétrica proporción de la belleza del románico y su geometría sagrada, en San Pelayo (
San Paio) de Diomondi...