Hola a todos
Está claro que el conocimiento como camino hacia Dios no es nada sin la fe. Así lo refleja el famoso crismón de la Ermita de San Bartolomé, en Aguilar de Codes, Navarra:
Precisamente, las palabras grabadas sobre las piedras hablan de eso, del triunfo de la nueva fe vista desde la perspectiva de alguien con altos conocimientos de liturgia cristiana. No es sólo un simple símbolo catequético (que también) sino un buen ejemplo de cultura eclesiástica y de conocimientos de exégesis (interpretación de los textos de la Biblia) por parte del teólogo redactor que lo ha diseñado.
- En el
dintel, la oración del perseguido; en el
tímpano, el himno de los redimidos.
- En el
dintel, se habla del sacrificio matutino en el rito judío; en el
tímpano, del sacrificio de Cristo a la tarde.
- En el
dintel, se habla del Templo de Jerusalén; en el
tímpano, del Nuevo Templo de Jerusalén, el Cielo.
- En el
dintel, se refleja la liturgia judía; en el
tímpano, la cristiana.
- En el
dintel, se grabó un versículo de un salmo que se recita en Laudes; en el
tímpano, un versículo de uno de los cánticos del Apocalipsis que se recitan en Vísperas.
-
En el dintel, el Salmo V; en el tímpano, el capítulo V del Apocalipsis. - En el
dintel, un versículo del Antiguo testamento; en el
tímpano, un versículo del Nuevo Testamento.
En el dintel, se escribió el versículo 8 del Salmo V: “Pero yo, por tu inmensa bondad, llego hasta tu Casa, y me postro ante tu santo Templo con profundo temor.”El Salmo V, se presenta como una oración de la mañana. Su contexto teológico es el siguiente: “A la hora en que se ofrece el sacrificio matutino (Ex. 29. 38-40), un fiel israelita expone su caso al Señor (v. 4), apelando a la justicia de Dios (v. 9). El hecho de encontrarse en el Santuario (v. 8) es para él una prueba de su inocencia, porque ningún impío podría gozar de ese privilegio (vs. 5-6). Para hacer más apremiante su oración, el salmista menciona a sus enemigos, que lo acusan calumniosamente (vs. 9-11). El Salmo concluye con una expresión de confianza en el Señor, que bendice a los justos y los protege como un escudo (vs. 12-13).” (El libro del pueblo de Dios, La Biblia)
En la Liturgia cristiana, este salmo V se canta (o recita) en los Laudes del lunes de la I semana.
En el tímpano se labró el versículo 12, del capítulo V del Apocalipsis: “Digno es el Cordero degollado de recibir el poder, la riqueza, la sabiduría, la fuerza, el honor, la gloria y la alabanza.” En la Liturgia cristiana, este Cántico del Apocalipsis se canta (o recita) en las Vísperas del martes de la I semana. Es el himno de los salvados, de los redimidos por la sangre del Cordero.
“Se refiere al «Cordero degollado», al que se le atribuye la misma gloria de Dios Padre, pues «digno es» «de recibir el poder, la riqueza, la sabiduría, la fuerza» (5,12). Es el momento de la contemplación pura, de la alabanza gozosa, del canto de amor a Cristo en su misterio pascual.” (Juan Pablo II)
El teólogo redactor que ordenó labrar estos dos versículos conocía muy bien tanto el significado simbólico como la relación teológica que se establecía entre ellos.
Además, al releer el último versículo del Salmo V: “Porque tú, Señor, bendices al justo, como un escudo lo cubre tu favor”, me he acordado de la broma que siempre hace demiguel sobre el significado del Crismón, la chapa de la coca-cola, es decir, el escudo de la nueva religión, la que salva al perseguido. Y eso no lo sabía sólo Roma, que se lo pregunten también a Sancho Ramírez.
Un abrazo a tod@s