Hola a todos
Hoy, dos ejemplos visuales que ponen de manifiesto que hubo estamentos eclesiásticos que siguieron estos principios de justificación teológica sobre la utilización de las piedras preciosas:
Citar:
“En la joya, sea de oro o de piedras preciosas, se estima, primeramente su valor artístico, después sus materiales y, finalmente, el elemento más importante: la perfección de la ejecución material. Es lo que, lapidariamente, el abad Suger hizo inscribir en la puerta del templo de Saint Denis ; "Si quieres exaltar la gloria de estas puertas no te maravilles por el oro... sino por la maestría del trabajo».”
“El hecho de que la Biblia aludiera a ciertos materiales preciosos para referirse a atributos divinos, le sirvió al abad Suger de Saint-Denis (París, abad desde 1122 hasta su muerte, en 1151) de argumento para justificar el uso de metales y piedras preciosos en adornos, prendas y relicarios, bajo su administración.”
M.- TERESA JIMÉNEZ PRIEGO, Perfil del joyero, Espacio. Tiempo y Forma. Serie Vil. H.^ del Arte, t 10. 1997. págs. 59-110, p.60 y p. 67.
Esta justificación teológica llegó a afectar hasta a los Vivientes del Tetramorfos. Pondremos dos ejemplos.
El primero, el relicario de San Andrés, en el Museo Catedralicio de Tréveris, Alemania:
El segundo, esta tapa de un evangelario, también en el Museo Catedralicio de Tréveris, Alemania:
Además, en este segundo caso, ya vemos cómo incide la luz artificial sobre las piedras preciosas de la tapa. No sólo eso, alzarlo en medio de la liturgia en el día que sabes que la luz entra de forma directa sobre el ábside debía provocar un efecto...
Citar:
“La primera construcción gótica se debe al genio del abad Suger del monasterio de Saint- Dennis, en Francia, en el año 1140 aproximadamente. Embebido de platonismo y sobre todo de neoplatonismo, el abad Suger, tomando de Plotino la idea del “Nous”, la inteligencia divina, y de la luz, como reflejo de la sabiduría divina, concibió - para el coro de la Abadía de san Dionisio - un edificio religioso en el cual esta idea de la inteligencia divina se haría visible en una primacía de luz transfigurada a través de reflejos de oro y piedras preciosas.”
(Carlos Pérez Agüero, El románico y el gótico. Reflejo de la ciudad cristiana) Charla pronunciada el 20-07-2007 en el Priorato de “Nuestra Señora Mediadora de todas las Gracias”, Buenos Aires. PDF)
En el fondo, se trata de otras maneras y superficies sobre las que se plasmaron los cuatro Vivientes; pero siempre, buenos, muy buenos los artistas. Y los teólogos redactores, también.
Un abrazo a tod@s