Hola a todos
Gracias a Piratesa por su última entrada en la que pone de manifiesto una verdad que, a veces, se olvida: nos une el ROMÁNICO.
Desde hace tiempo, vengo proponiendo públicamente que, en el estudio del arte románico, los teólogos redactores de los diferentes programas teológicos son los grandes olvidados. Sin embargo, siempre tengo presentes estas palabras:
"El arte de todos los tiempos surge como expresión de estos sentimientos que, una vez objetivados, son utilizados para hacer vivir y transmitir la fe del pueblo. También en el arte cristiano, la manifestación de la belleza está sujeta a las condiciones y modas intramundanas. Pero, en este caso, lo que el pintor o el escultor tratan de expresar no es la moda de una belleza pasajera, sino la fe de la comunidad con los medios expresivos de su entorno y de su época. Si partimos del supuesto de que el “sensus fidelium” es lugar teológico básico, la obra de arte, en cuanto que puede captar y testimoniar la fe de la comunidad, también tendría valor de lugar teológico. Pero, al valorar el arte como lugar teológico nos implicamos en la necesidad de averiguar cómo la creatividad sirvió de mediación para expresar las creencias; y hasta qué punto es necesaria una mutua interrelación efectiva del teólogo y del artista."(CASAS OTERO, J.)
Es más, opino que sin la interrelación de dos teólogos redactores, en el claustro del Monasterio de Santo Domingo de Silos, jamás tendríamos estos magníficos relieves:
El segundo teólogo redactor supo que el resto de los relieves del claustro conformaban lo que hemos venido a llamar un Tetramorfos analógico y que faltaban los temas relativos al Evangelio de San Mateo o al acontecimiento salvífico de la Encarnación. A través de una lectura analógica se puede demostrar que la suma de todos los relieves del claustro de Silos está representando un Tetramorfos a través de la interpretación simbólica y teológica que San Jerónimo proponía para los símbolos de los animales que componen el Tetramorfos:
1. Machón suroeste (obra del segundo maestro). Temas: Anunciación, Árbol de Jesé; es decir, la Encarnación, el hombre, San Mateo.
2. Machón noreste (obra del primer maestro). Temas: Crucifixión, Sepulcro; es decir, la Pasión, el buey, San Lucas.
3. Machón noreste (obra del primer maestro). Temas: Emaús, Incrédulo Tomás; es decir, la Resurrección, el león, San Marcos.
4. Machón sureste (obra del primer maestro). Temas: Ascensión, Pentecostés; es decir, la Ascensión, el águila, San Juan.
El segundo teólogo redactor supo interpretar al segundo, pero su teología ya no era idéntica. Ya callo.
Un abrazo a tod@s