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¿Cual debía ser la ubicación de la portada? ¿Existían criterios al respecto? ¿Influía el simbolismo?
A simple vista parece que estamos en algo que se produce aleatoriamente, pero si profundizamos algo más, quizás nos llevemos alguna sorpresa.
Por ejemplo, en relación con los monasterios. Como sabemos, el plano de Saint Gallen, diseñado en Reichenau, provoca una revolución en la forma de concebir la distribución de espacios en los monasterios. En lo principal, la iglesia ya no estará en el centro, sino en un costado del recinto puramente monástico, y el claustro, por razones climáticas básicamente, se ubicará junto a la misma en su costado sur. Con ello nos quedan sólo los lados oeste y norte para que los no monjes accedan a la iglesia sin pasar por el claustro.
Por otra parte, las iglesias rurales se construían en el centro de la villa, en la plaza, o la villa se desarrollaba a partir de ellas. A efectos de imagen, aunque tenga el condicionante del caracter defensivo, que soslayo, me viene a la cabeza la iglesia de San Miguel de Almazán con su obligada puerta al sur. O Biota, ésta también con puerta al oeste. La plaza era lugar de reunión, de acontecimiento social, de fiestas y bodas, y, por tanto, lo lógico era la posición de la iglesia al norte de la misma para reducir el frio que desmereciera el acontecimiento. Hay pues toda una carga climatológica en defensa de la portada al sur.
Frente a este criterio existió la realidad física que aconsejó ocasionalmente la apertura al norte como vía de acceso a la iglesia. El caso más llamativo es quizás el de la puerta francígena de Santiago de Compostela, lugar por el que entraban los peregrinos pues accedían por ese costado cuando llegaban desde el Gozo. En otras ocasiones, la ubicación física obligaba a abrir por el norte. Ocasionalmente, la villa se desplazaba físicamente por diversas razones, como la construcción de un puente, por ejemplo, y la puerta sur perdía su justificación, aunque se mantuviese si ya estaba hecha, como en Sotillo (Sg), donde no se abrió una puerta norte despues de todo, y, finalmente, como en Santa Marta de Tera, a lo largo de la vida de la iglesia se acometieron cambios que obligaron a habilitar una puerta al norte para acceso del parroquiano a la iglesia. Quizás hubo otras razones, aunque no creo que tuviesen una justificación que modificase mi criterio de carencia de valor simbólico. Saludos.
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